Yo imagino a los fanáticos colombianos cada vez que llega el ranking de la FIFA, una mirada de esas con brillo en los ojos como cuando un niño abre un juguete de navidad, nos alegramos aunque disimulemos y sepamos que ese ranking no representa totalmente la realidad futbolística global, pero al final de la historia nos terminamos comiendo el cuento (en el buen sentido de la palabra).
Como selección posicionada en el top 10 de las mejores tenemos la obligación de hacer un buen papel en la copa del mundo, y con buen papel quiero decir llegar por lo menos a los cuartos de final de dicha competencia. Esos objetivos se logran con un buen nivel de los jugadores sumado a una correcta preparación. En esa buena preparación son importantes los amistosos, en especial los que son próximos a la cita mundialista, eso no significa que los de antes no importen, y he ahí mi descontento con la fecha FIFA que se va a jugar el 5 de marzo: El rival sencillamente no es el esperado.
Venimos de jugar 2 amistosos importantes (ante Holanda y Bélgica) hace unos meses atrás y pasamos el examen, la selección se vio sólida en su juego y demostró que puede pelear mano a mano contra los grandes del continente europeo, siguiendo ese orden de ideas debimos haber conseguido un amistoso de nivel similar para la fecha FIFA que se avecina, no un rival que es 58 en el mencionado ranking y que no fue al mundial.
Y bueno, nos tendremos que confirmar con jugar con Burkina Faso, no es la peor selección del mundo, pero se pudo haber elegido un rival mejor, pero Pékerman sabrá más que yo, al fin y al cabo el nos clasificó.
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